En el
deporte, en muchos equipos de categorías inferiores castigan a los deportistas
sin jugar o competir el fin de semana a causa de un bajo rendimiento en los
estudios. Les privan de su pasión de disputar el partido del fin de semana que
tantas ganas tienen de poder jugar después de una semana de entrenamiento.
Además se les priva de ciertos valores que aporta la competición a la persona,
como son la motivación y el querer superarse a uno mismo. Todo esto engloba
valores fundamentales como son la superación, la humildad, dedicación… ciertos
valores que permiten a los deportistas crecer como persona.
Existen
otras circunstancias en las que privan sin deporte a los niños, todo
relacionado con el ámbito educativo. Son casos en que los padres castigan a sus
hijos sin entrenar por malas notas en el colegio o el instituto. Son
restricciones que no tienen ningún beneficio, pues no olvidemos que son todavía
niños y están en un proceso de desarrollo mental y crecimiento físico, y es que
el niño necesita de esta actividad para impulsar este desarrollo y crecimiento.
En este caso,
creo que relacionar el ámbito educativo con el deportivo no es lo más adecuado.
Pues en el ámbito educativo se fomentan unos valores distintos a los
deportivos. Y como dice el artículo es muy importante la actividad física y
sobretodo compaginarla con el estudio, pues esto puede aportar un mayor
rendimiento en el estudio. El cuerpo necesita descansos durante el estudio, y
estos pueden ser aprovechados para realizar deporte. Pero esto último no es lo
mismo que relacionarlo, sino compaginarlo. Existen otras alternativas
eficientes para educar a los niños.
Finalmente, es muy importante que el niño haga deporte
y no le debemos privar de ello. Pero debemos inculcarles que lo más importante
y primordial es el estudio, tener una base educativa y poder asegurarse un
futuro. Pues vivir solo del deporte que se práctica pocos lo pueden disfrutar.
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